Doctrina de Shock

Entender que hoy en día nuestros pensamientos y nuestra visión se encuentra claramente manipulada por grandes grupos políticos, es una tarea difícil, no solo por comprender que nuestra individualidad muchas veces está preconfigurada por estratos elitistas, sino que también muchas veces se oculta la realidad detrás de movimientos sociales y políticos. En este aspecto, el libro de doctrina de Shock es experto. 

La autora manifiesta que la manipulación en los tiempos de crisis resulta más sencilla, ya que la gente está dispuesta a aceptar situaciones que en otros momentos no lo harían. desde este sentido, muchas de las crisis ya sean políticas o económicas realmente pudieran tener otra lógica detrás, la de manipular a la población.

En el gobierno de Salvador Allende, cuando fue derrocado por un golpe de estado financiado por Estados Unidos, Chile vivió un momento de Shock y fue cuando se impuso un régimen totalitarista liderado por el asesino Agusto Pinochet, esto se consiguió ya que Estados Unidos supo aprovechar el momento de violencia y conmoción que se vivía, además fue un evento clave para reprimir movimientos de libertad, y para privatizar sectores económicos, lo que evidentemente responde a la lógica capitalista estadounidense. 

La autora también resalta que durante estos períodos de "Shock", se inscriben narrativas sociales las cuales tienen como objetivo justificar acciones que de otra manera no serían aceptadas. Esto tiene similitud con lo que pasa hoy en día en nuestro país, que debido al momento tan violento que vive la gente ha aceptado condiciones de vida sin mostrar resistencia, como los toque de queda, militares tomándose las calles e incluso la subida del IVA, lo que nuevamente, responde a una lógica de capital. Todo esto gracias a que el shock colectivo distrae las medidas muchas veces abusivas, que se toman.

Todos estos aspectos y ejemplos muestran impacto en la psicología social, ya que generan traumas, y esto ayuda a que seamos más manipulables, accedamos a condiciones injustas, y sobre todo que vivamos sometidos a un modo de vida impuesto y beneficiado principalmente a un gobierno estadounidense. Ya que no es de extrañar que durante estos estadios de conmoción social, sea el momento donde se aprovecha para privatizar sectores públicos, donde los beneficiados son los gringos.

Si bien este es un escrito corto para la extensión y relevancia de la obra, me ha ayudado a pensar y reflexionar en las condiciones de manipulación en las que muchas veces gobiernos elitistas aprovechan una situación desafortunada para imponer su ideología y sus condiciones de vida.